Injerto de Sandia
En el injerto de sandía se utiliza como portainjerto la calabaza, existiendo en el mercado actual distintas casas de semillas que proporcionan, cada una, su variedad en cuanto a patrones, todos ellos certificados y garantizados.
Método de aproximación en sandía.
Las fases que realizamos en este tipo de injerto son las siguientes:
– Injertar cuando la variedad y el patrón tiene la primera hoja bien desarrollada y está apareciendo la segunda
– Hacer una incisión en el portainjerto, comenzando debajo de los cotiledones en el lado opuesto a la hoja, hasta el centro del talo y hacia abajo, de 1 a 1,5 cm.
– Hacer una incisión en la sandía comenzando por debajo de la primera hoja verdadera, hasta el centro del tallo.
– Ensamblar las dos plantas.
– Ligar con banda de plomo o pinza.
– Repicarlas a otra bandeja.
– Mantener las planas recién injertadas en un ambiente cálido (25-30 º C) y húmedo (80-90 %), en túneles de plástico o cámaras de reproducción.
– Pasado un tiempo, cortar el tallo de la sandía por debajo del injerto, y la cabeza del patrón conservando solamente los dos cotiledones y la primera hoja.
– Colocar seguidamente las plantas en las condiciones climáticas del semillero, fuera de los túneles de plástico o cámaras de reproducción, durante dos días para que se aclimate.
– Preparar las cajas para transportar las plantas injertadas a los invernaderos de destino.
– La duración aproximada desde la siembra de la sandía hasta la retirada de la planta injertada por el agricultor es de unos 40 a 60 días, dependiendo de la época del año.